Conseguir Mi Promesas bíblicas para momentos difíciles To Work
La enseñanza de no temer al ser humano que puede matar el cuerpo es crucial para comprender la importancia de estar firmes en nuestra Convicción y dejarlo en dios en Dios incluso en momentos de sufrimiento y persecución.
Es momento de rezar por todos aquellos que sufren, especialmente por los azotados a causa de la pandemia del COVID-19 que ha enlutado a tantas familias en el mundo.
Jesús quiere que sean conscientes de los posibles costos personales de predicar el evangelio en medio del sufrimiento.
oportunidad para usar las pruebas que Dios pone en tu camino para demostrar cuán sobresaliente es él. Matt y yo oramos para que Dios use esta clase con ese fin: crear y acrecentar la fe en Él[1], mientras escuchamos en sus promesas que nosotros como iglesia asimismo podemos sufrir por causa de su salvación.
En respuesta a esta situación, Jesús todavía nos enseña la importancia de estar firmes en nuestra Certeza y testigos valientes delante el rechazo de las personas. Él nos recuerda que debemos esperar en Dios y no temer a los seres humanos que pueden matar solo el cuerpo, sino al Señor que tiene el poder sobre el alma y el cuerpo.
A estos Dios se propuso adivinar a conocer cuál es la gloriosa riqueza de este misterio entre las naciones, que es Cristo en ustedes, la esperanza de paraíso. (Colosenses 1:27)
Cada vergajazo que recibió en su cuerpo fue un afirmación del aprecio incondicional que sentía cerca de la humanidad. El sufrimiento de Cristo fue un acto voluntario y una muestra de amor sin límites.
Por cuanto permanecen fundados y firmes en la fe, sin ser removidos de la esperanza del evangelio que han aurícula, el cual ha sido predicado en toda la creación debajo del cielo (Col website 1:23).
A estos Dios se propuso acertar a conocer cuál es la gloriosa riqueza de este enigma entre las naciones, que es Cristo en ustedes, la esperanza de cielo.
Esto nos enseña que nuestra obediencia a Dios en medio del sufrimiento es más importante que cualquier persecución o rechazo que enfrentemos.
Porque yo conozco muy aceptablemente los planes que tengo proyectados sobre ustedes –oráculo del Señor–: son planes de prosperidad y no de desgracia, para asegurarles un porvenir y una esperanza.
Pero no a una fe ciega que confía simplemente por echarse en brazos, sino a una Certeza fundamentada en la evidencia de la obra de Dios en este mundo. Y es precisamente esa clase de Confianza el objetivo de esta clase.
Y si la enfermedad y el dolor se vinculan al pecado y al mal, la vida y la Lozanía total se las relaciona con la fidelidad a Dios y a sus mandamientos.